Con todo el esfuerzo y el tiempo que requiere, sin duda se estará preguntando si merece la pena doctorarse. En última instancia, se trata de un procedimiento que debe considerarse de forma constructiva, entusiasta y pragmática. Asegúrese de que tiene un objetivo en mente si piensa cursar estos estudios de posgrado. Es decir, actuará según su deseo, con un propósito claro en mente y una comprensión de los posibles resultados. En caso de que no encuentre el impulso para completarlo, puede sentir que su sacrificio ha sido en vano. Le aconsejamos que considere detenidamente cómo la obtención de un doctorado le permitirá cumplir sus objetivos futuros. Para determinar si la realización de un doctorado influirá realmente en su carrera, es importante tener una noción amplia de hacia dónde quiere dirigirla antes de empezar.
Estos argumentos a favor del doctorado pueden ayudarle a tomar una decisión.
¿Por qué hacer un doctorado?
- Por su deseo de aprender más y ampliar sus conocimientos sobre un tema concreto.
- Para establecerse como experto y fomentar la innovación en un campo de estudio concreto.
- Para centrar su carrera en la investigación académica.
- Para optar por una escala salarial más alta.
- Para demostrar a los posibles empleadores lo motivado, apasionado y capaz que es en su campo de conocimiento;
- Al fin y al cabo, está consciente de que avanzar en el campo elegido no será sencillo sin un doctorado.